Del Déficit de Atención al Trastorno por Déficit de Atención
A menudo cuando hablamos sobre el Trastorno por Déficit de Atención -TDA- (si es con hiperactividad, TDAH), lo hacemos de forma genérica, identificando a las personas que lo tienen con enfermos a los que conviene tratar con medicación para no se sabe muy bien qué.
Sin embargo, convendría dejar claros algunos conceptos fundamentales y científicamente justificados en la actualidad, para evitar cometer errores que pueden tener graves consecuencias.
El Déficit de Atención no es una enfermedad
En primer lugar: La condición Déficit de Atención (con o sin hiperactividad) es una característica de la persona que se transmite genéticamente como el color del pelo, la estatura, la miopía o el temperamento introvertido. NO es una ENFERMEDAD.
Pongamos un ejemplo: Si a una persona de estatura inferior a la media, bajita, le colocamos las cosas fuera de su alcance, si no se le adaptan los muebles o la ropa, si se le discrimina y se le insulta por ser “diferente”, es muy probable que esa persona empiece a pensar que es “menos” que los demás, que nunca podrá hacer lo que hacen los otros.
Probablemente vivirá con estrés, ansiedad y malestar personal. Todo ello le terminará produciendo un “trastorno por… ¿estatura inferior a la media?”.
Si por el contrario, se le adaptan los muebles, la ropa, si se le tiene en cuenta, si se le trata con respeto… no sufrirá estrés, ni ansiedad, ni desarrollará ningún «trastorno» por su estatura.
Exactamente esto es lo que ocurre con las personas que poseen la CONDICIÓN Déficit de Atención con o sin hiperactividad.
Poseer la Condición no significa desarrollar Trastorno
Algunas viven en un entorno social, tanto familiar como escolar, que conoce sus características y le facilita la convivencia, adaptándose a ellas y enseñándole a que se desenvuelva de forma adaptativa, con paciencia y comprensión. Estas personas NO TIENEN POR QUÉ DESARROLLAR TRASTORNO por Déficit de Atención.
Sin embargo, si sucede lo contrario, será muy probable que lo terminen desarrollando tarde o temprano.
El Trastorno por Déficit de Atención es una situación temporal
Es fundamental, por tanto, que tengamos claro que la SITUACIÓN de TRASTORNO NO está asociada a la CONDICIÓN. Es decir, podemos tener a dos personas hiperactivas o inatentas que no desarrollen trastorno porque viven en un entorno que los comprende y les facilita la adaptación. Esas mismas personas, en otro ambiente más intolerante, más hostil sí que lo podrían desarrollar.
Concluyendo, la SITUACIÓN de trastorno por Déficit de Atención se puede evitar, y en caso de que aparezca, es temporal, se puede corregir, mediante una intervención psicoeducativa personalizada y bien diseñada que trabaje tanto con el sujeto como con su entorno. La CONDICIÓN Déficit de Atención, sin embargo, permanece durante toda la vida, como el color de los ojos o la estatura.